Los interiores de la vivienda permiten una pluralidad de espacios en los que realizar actividades de lo más variadas.

Una de las necesidades con las que cuentan las personas y que muchas veces no es tenida en cuenta a la hora de realizar el diseño de la casa es la de colocar un espacio en el que se pueda disfrutar solo de la actividad de leer.

Cuando no se tuvo en cuenta desde el principio, no hay que desesperar: el diseño de interiores tiene respuestas para todos los casos, y es un interesante desafío para el profesional el poder conseguir un lugar de lectura dentro del diseño de la vivienda en la que no se pensó en él.

Muebles para el rincón de lectura

Cuando se plantea diseñar un rincón de lectura, lo primero que tenemos que determinar es qué muebles son los necesarios para este espacio. Básicamente se necesita una butaca, que sea lo suficientemente cómoda para estar relajado y tranquilo, una lámpara para poder leer con claridad, y una estantería o similar en la que colocar libros.

Esa sería la base. A partir de ahí se pueden colocar distintos accesorios según la configuración del espacio, las necesidades del diseño interior o los gustos de los propietarios.

Diseñando un espacio de lectura

Para diseñar el espacio de lectura, por un lado están los requerimientos que como diseñadores podamos tener para esto, y por otro las posibilidades que el espacio brinda.

Si del diseñador se trata, lo mejor es conseguir un espacio que cuente con ventanas en dos paredes distintas, esto es para que se pueda tener iluminación natural la mayor parte del día. Cuando se coloca una o más butacas, es interesante que sean elementos de fácil movimiento, de tal modo que se puedan acomodar a la zona que más luz recibe.

Si el espacio de lectura está incluido dentro de un espacio mayor, como puede ser el salón o el comedor, es interesante colocarle una moqueta, que por un lado marque cuál es la superficie que abarca el rincón de lectura, y a la vez sirve para dar mayor confort a la zona de lectura y reducir los ruidos que provocan los pasos por la zona.

Diseñando espacio de lectura: butacas

Cuando determinamos las butacas para diseñar el rincón de lectura, siempre se piensa en la clásica con dos reposabrazos. Es una buena solución, pero no hay que descartar la posibilidad de colocar una chaise longue. Este tipo de mueble le da mucha personalidad al espacio, y además puede resultar muy cómoda para la lectura. Lo que sí hay que contemplar es que es necesario dotar de algunos cojines para conseguir la posición cómoda a la hora de realizar la lectura.

Pero la butaca con el reposapiés es también una clásica solución y que tiene buenos resultados.

Delimitando el espacio diseñado

El rincón de lectura está en muchos casos dentro del espacio del salón. No se puede ni se quiere separar este espacio con tabiques o cristaleras. Entonces son los recursos de diseño interior los que pueden realizar esta delimitación. Una solución es la que hablábamos antes acerca de colocar una alfombra o moqueta que delimite una superficie.

Otra posibilidad es realizar una diferenciación en el tratamiento del piso. Colocando una cenefa que demarque una superficie distinta, o con un pavimento diferente en el rincón, se marca de manera virtual cuál es el espacio diseñado como rincón de lectura.

También se puede marcar una diferenciación de espacios en el tratamiento de las paredes. Si el rincón de lectura es una superficie muy pequeña, el muro que le corresponde se puede pintar de una forma diferenciada del resto de la pared, indicando de esa forma que la actividad en ese espacio es diferente.

Diseñando el lugar adecuado

El rincón de lectura se puede diseñar en distintos ambientes de la casa.

En general se lo piensa relacionado con la zona de estar de la vivienda, pero otra opción interesante es la de crear el espacio de lectura dentro del dormitorio principal. El espacio de lectura se diseña generalmente para los mayores de la casa, por lo que el dormitorio puede ser el lugar idóneo. Cuando se cuenta con un dormitorio de dimensiones generosas, se puede separar una superficie para crear un rincón de lectura. Es interesante que se encuentre cerca de una ventana, para poder tener una iluminación natural directa y no tener que depender siempre de la iluminación artificial.